Hemos escuchado hasta la saciedad el término contorno o contouring que consiste en usar tonos oscuros en partes estratégicas del rostro para acentuar los rasgos, la mejor exponente es Kim Kardashian y ahora escuchamos del strobing que consiste en lo contrario, es decir usar iluminador en zonas estratégicas del rostro para conseguir toques de luz que, finalmente, nos harán lucir radiante y sin rastro del cansancio.
Toma nota a cómo y dónde aplicar un iluminador en el rostro. Lo primero es que al usar un iluminador puedes realzar tu mirada, darle volumen a tus labios, resaltar los pómulos y afinar tus facciones.
Se debe aplicar:
- En el lagrimal, ideal para ampliar la mirada.
- Encima de la ceja para que el párpado se vea más levantado.
- En los pómulos para estilizar el rostro.
- En la nariz para darle una luminosidad natural.
- En el centro de la barbilla para dar una forma más bonita al contorno de la cara.
En el centro de la frente si no llevas capul, servirá para dar más luminosidad.